
Hace un rato, a eso de las seis y media de la tarde, había acabado de estudiar y estaba en la cama con la persiana medio bajada y la luz apagada, con mi gato y la manta. Detrás de los cristales sonaba la lluvia, cual película romántica de antaño. Y estaba tan tranquila y relajada que parecía increíble que ahí fuera el mundo siguiese a su ritmo habitual.
8 comentarios:
Realmente placentero. Ahora mismo voy a copiarte.
aunque no me gusta NADA el invierno, debo admitir que para ciertas cosas es muy romántico... (con una estufa al lado)
me gusta tus palabras. relajan.
esos momentos donde pase lo que pase, todo es secundario
Zoofilia. Siempre ahí.
Es que el tiempo es tan relativo, bonita. Es lo que tiene.
Mucha luz y besos para ti.
que imagen mental mas relajante y la de la foto enamora.
Quiero uno de esos momentos... menos mal que falta poco ya para el fin de semana. ^^
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